El Señor me sanó del asma

A los once años tuve que ir al hospital por problemas respiratorios. Después de diversos exámenes, el médico nos contó a mi madre y a mí de que padecía de asma y que era de por vida. Desde ese entonces toda mi infancia hasta mi adolescencia tuve que usar inhalador. Pasó el tiempo y los síntomas comenzaron a disminuir, pero en primavera volvían los síntomas. Hasta no hace mucho comencé con trastornos de sueño (ahogamiento o apnea y esas cosas).

Pero el mes pasado fue el peor de todos. Mientras dormía junto con mi esposa, desperté abruptamente debido a un fuerte ataque de apnea, pero cuando intentaba respirar más me costaba. Era un ahogo terrible. Estuve muchas horas así. Entonces junto con mi esposa comenzamos a orar al Señor y clamarle junto con música cristiana. Le pedía de todo corazón de que me sanara. Y al cabo de unos días, cuando volvíamos a nuestro hogar, de nuevo comencé a sufrir de lo mismo. Pero como estábamos cerca del hospital de maipú nos bajamos y me atendí de urgencia. El doctor me revisó y para sorpresa me dijo que no tenía asma, de hecho, no tenía ningún problema pulmonar, y que sólo había tenido un ataque de ansiedad.

Hasta este día no he dejado de darle las gracias a mi Señor por haberme sanado del asma. Estoy agradecido porque ya no tengo nada en mis pulmones.

Grandes son sus maravillas.

Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios? (Juan 11:40)

Grandes son sus maravillas.

Jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios? (Juan 11:40)

!!!Gloria a Dios !!!