RESCATANDO EL ROMANTICISMO

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El romanticismo, dentro de la historia, fue un movimiento cultural y político, originado a fines del siglo XVIII. El romanticismo le daba mayor importancia a los sentimientos del hombre, por sobre las tradiciones y reglas estereotipadas que habían regido hasta el momento. Por eso ahora, cuando hablamos de romanticismo, nos referimos a la máxima expresión de los sentimientos en una pareja. El romanticismo deja en un plano inferior lo material, lo superficial. Cuando el materialismo pasa a primer lugar en el matrimonio, se acaba el romance.
En el mundo, en este siglo XXI, frívolo, materialista y hedonista, el romanticismo parece ser cosa del pasado. Lo que nos enseñan los medios de comunicación y entretenimiento, como el cine y la TV, es que cuando una pareja se conoce y se gusta, se van como desesperados a la cama, desde la primera cita. Ya no existe la ilusión, el cortejo, la labor de conquista de parte del hombre. En las películas, es común que los novios vivan juntos antes de casarse (si es que llegan a hacerlo). ¡Pero nuestras vidas no deben regirse por Hollywood! La pareja cristiana tiene que regirse por las normas de conducta dictadas por Dios. El llamado amor libre, está fuera de la voluntad de Dios. Recuerden que estamos en el mundo, pero no somos del mundo.

RESCATANDO EL ROMANTICISMO EN TU MATRIMONIO
Ternura:
En nuestra sociedad preponderantemente machista, la ternura por parte del hombre, es considerada una debilidad y una falta de masculinidad, pero la ternura es un elemento básico en el romanticismo. No se puede ser romántico, sin dulzura en las palabras, sin ternura en las caricias y no por eso se les va a considerar amanerados a los hombres. La mujer actual, que trabaja y tiene mil cosas que hacer, tiene poco tiempo para manifestar su natural ternura femenina. Pero debe hacerla surgir desde su corazón y darse tiempo para manifestarla a su esposo.
Cartas y poemas:
Enviar una carta de amor o escribir un poema para la amada, no requiere gran conocimiento gramatical, lo que importa es lo que transmita. Además en estos días, se puede hacer por email y llegan más rápido. Una mujer siempre se va a emocionar al recibir unas letras que expresen amor, que le digan lo bella que es. ¿Cuánto hace que no le envías una carta de amor a tu esposa o le escribes un poema? A las mujeres les cuesta menos enviar una tarjeta, dedicar una canción o escribir una nota diciendo "te amo". El internet facilita estas acciones también, así que mándale una postal de amor a tu esposo todas las veces que quieras. También el celular puede ser tu aliado, una llamada para decirle que lo amas, le alegrará el día. No lo consideres cursi, es romanticismo.
Rosas (especialmente rojas):
¡A qué mujer no le gusta recibir flores! Maridos, no le lleven flores a sus esposas, solo en el día de San Valentín o cuando se enojan con ustedes, para contentarlas. Un ramo de rosas, cualquier día, de sorpresa, es como un multivitamínico para su matrimonio. Y ustedes esposas, sean agradecidas, cuando esto suceda, haláguenlos, muéstrense contentas.
Cena romántica:
Marido, lléva a tu esposa a un restaurante donde puedan pasar una velada romántica, tranquilos y olvídense de los problemas domésticos, de los hijos, de las cuentas, del trabajo, no hablen de nada de eso. Solos son ustedes dos, como cuando eran novios. Recuerden bellos momentos. Y si no hay dinero para el restaurante, le toca a las esposas. Preparen una cena romántica sorpresa, con velas y flores en la mesa, por supuesto, cuando los niños ya se han dormido. Hagan gala de sus dotes culinarias y agasajen a su marido con deliciosos platillos. Recuerden que a los hombres se les llega por el estómago, así que nada mejor para tenerlo contento y que se ponga muy romántico.
Los pequeños detalles en el matrimonio, son como el rocío matinal a las flores de un jardín. Lo mantienen fresco y radiante. Aprendan a usar la imaginación, a salirse de lo usual, a "personalizar" sus expresiones románticas. Lean juntos el libro del Cantar de los Cantares, que está lleno de romanticismo y sobretodo, mantengan una buena relación con Dios, oren juntos, el uno por el otro, porque si buscan primero el reino de Dios, todo vendrá por añadidura.

El: ¡Cuán bella eres, amada mía!
¡Cuán bella eres!
¡Tus ojos son dos palomas!
Ella: ¡Cuán hermoso eres, amado mío!
¡Eres un encanto! Cantares 1:15-16a

Que el Señor os siga bendiciendo, un saludo.