Ser cristiano no se trata de ignorar las cosas que suceden

Como creyentes, no estamos exentos de pasar por situaciones difíciles, pero no debemos creer que nuestro futuro va a depender de ellas, porque nuestro futuro está en las manos de Dios y dependemos de Él para que sea conforme a su buena y perfecta voluntad.

Ser cristiano no se trata de ignorar las cosas que suceden a nuestro alrededor, sino de contrarrestar lo que vemos, creyendo en las promesas de Dios, las cuales determinan los acontecimientos en nuestra vida.

Es por ello que podemos pasar por una circunstancia difícil sin ser afectados por ella, porque sabemos que todo terminará como Dios lo ha prometido, y no solo eso, sino que también nos dará una mayor madurez y estructura espiritual.