5 Pilares del Liderazgo.

Si bien que cada lugar es diferente, hay ciertas actitudes y comportamientos que obedecen a patrones socioculturales, provocando que las maneras de ejercer el liderazgo
sean diversas y adaptadas a cada tipo en particular. Hay parámetros que
los jóvenes observan a nivel general, máxime ahora que la juventud
enfrenta a la vorágine del mundo moderno.

La clave del éxito en el ministerio juvenil


¿De que forma lograremos un liderazgo exitoso?, sin duda que con el ejemplo. ¡Que se les antoje ser como tu!

En lo que al ministerio juvenil se refiere, descubrí ciertas normas que
me han permitido y movilizar a jóvenes de diferentes ciudades en nuestro
país, aun en América Latina. Estos cinco principios los llamo la clave
en el éxito en el ministerio juvenil.

Esperamos que sean de bendición en cualquier lugar y cultura donde se apliquen:

1.- El poder mas grande en un líder es el ejemplo

Enfrentamos a una juventud que ya no cree en las promesas ni en
palabras, no cree en buenas voluntades sino en hechos. La juventud de
hoy en casi toda América Latina es escéptica. Algunos incluso no
rechazan la salvación en Cristo, simplemente no aceptan que exista, es
generación de joven de hoy es el poder de referencia, o dicho de otra
forma, el poder del ejemplo. A semejanza del Maestro debemos hacer:
Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros
también hagáis. Cada enseñanza del Señor estaba totalmente respaldada
por sus actos, y a pesar de tanto tiempo, su vida sigue conmoviendo a
cualquier cultura hasta el día de hoy. ¿de que forma lograremos un liderazgo
exitoso? Sin duda que con el ejemplo. ¡ que se les antoje ser como tu!
Que existan parámetros que a ellos les atraigan. La nueva generación
grita a sus lideres: no me digas, mejor muéstrame. Nuestra actitud como
líder no es algo que se dice, sino que se vive.

2.- El secreto de estar arriba es mantenerse abajo

De pie hasta el más fuerte se ha caído, pero de rodillas ante la cruz del Calvario hasta el más débil puede sostenerse. En el liderazgo
nos acostumbramos a cierta posición y respeto de los demás hacia
nosotros, esto implica una contradicción porque a veces nosotros
queremos vernos cada día mas refinados, pero por otro lado, el Señor
quiere vernos súper quebrantados delante de su presencia. Debemos hacer
lo correcto con un ver espíritu humilde siendo Jesucristo el que nos
levante, humillados, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que sea
él os exalte cuando fuere tiempo. Mantente abajo, y el te mantendrá
arriba; no trates de impresionar a las personas con los que crees que
eres o con lo que tienes, mejor deja que Cristo lo hago por ti. Cuando
recibamos un reconocimiento en cierta manera merecida, llevémosla a la
cruz del Calvario, ya que el nombre que verdaderamente importa no es el
nuestro, sino el de él. Quien anhela ser mayor tendrá que convertirse en
servidor de todos. Porque la humildad no es una apariencia, es una
actitud del corazón.

3.- El liderazgo se fortalece a base de relación

Jesús no solo se dejaba ver cuando enseñaba u oraba por los enfermos,
también convivía por sus discípulos, comía y conversaba con ellos, es
mas, tenia en Bethania, un lugar donde descansaba en casa de su buen
amigo Lázaro. Este ejemplo nos enseña que bebemos conocer la que
presidimos, para guiarlos, para conocer sus anhelos, para pastorearlos,
para saber lo que piensan con el fin de orientarlos, conocer sus sueños
para impulsarlos. La juventud del siglo XXI, desea conocer a sus
líderes, quiere estar cerca de nosotros. No solo aprecia al dirigente,
sino quiere ser parte del equipo. En el liderazgo de relación, delegamos
autoridad, generando una serie de oportunidades. Recordemos que la
juventud moderna no quiere dirigentes sabelotodo, prefiere líderes
ámalos a todos.

Evitemos el miedo a que conozcan nuestro lado humano, dejemos que se
acerquen. Al ver nuestros defectos, al conocer cuando nos enojamos o
lloramos, ellos permanecerán con nosotros. Querido lector, si hace esto
tendrás un ejercito y compañeros inseparables para toda la vida.
Atrévete a darles el nivel de amistad, ya que un asistente a veces
falla, un colaborador también, pero un buen amigo no. Jesús dijo: ya no
les llamare siervos…os he llamado amigos.

4.- El líder reproduce lo que es en otros

Si el original esta mal, las copias también lo estarán, pero si el
original esta bien, las copias estarán listas para cumplir con su
objetivo. Si queremos jóvenes adoradores, tenemos que ser lideres
adoradores, si queremos que sean intercesores, deja que nos vean buscar
el rostro de Dios. La mayoría de nuestros muchachos han puesto su mirada
en personas que no tienen muchas cosas buenas que mostrar, tratan de
imitarnos aunque sus vidas sean escandalosas. Incluso algunos
adolescentes reproducen sus actitudes y forma de vestir. Por lo tanto,
es hora de que los líderes vivamos conforme al modelo del Espíritu Santo y se reproduzcan en nuestra juventud. Dice un refrán popular: como es el líder, es la gente.

5.- El líder siempre vuelve a intentarlo

El éxito nunca viene a la primera, es el producto de muchos intentos, de
un proceso camino al perfeccionamiento. Es probable que a la primera
las cosas no salgan bien, pera la segunda vez saldrán mucho mejor. Así
se forjan los grandes líderes, los que no se frustran cuando las cosas
salen mal, sino que les sirve de base para ser mejores y en la próxima corregirlos. Esta carrera no es de velocidad,
es de resistencia, no se trata del que llegue primero, sino de que
alcances a cumplir el propósito por el cual Dios te llamo. Nadie se
esfuerza para rendirse pronto, con la ayuda del Señor llegaremos a la
meta. Las cosas buenas no salen fácilmente así que nunca debemos
rendirnos, no debemos retroceder,
ni perder la fe. Volvamos a intentarlo con un espíritu inquebrantable,
que esta vez, la mano del Dios Todopoderoso estará con nosotros, y él
nos dice: no temas, yo te ayudo.

Que el Señor os bendiga, un saludo.