Vivir en el Espiritu Santo

1Corintios 3:16 ¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?
Dios nos habla de vivir en el espíritu en Romanos 8:1-27
Dios nunca nos condenará por nuestros pecados porqué Jesucristo ya pagó
el precio de una vez por todas. Cuando decidimos entregar nuestra vida
al cuidado de Dios, podemos estar seguros de que él no nos condenará. Si
hemos confesado nuestros pecados y aceptado el perdón de Dios en Cristo
ya no hay <>.Una vez que reconozcamos
que somos impotentes para pelear con nuestra dependencia, debemos buscar
a Dios para recibir el poder que necesitamos.
El espíritu de vida que Pablo menciona es el Espíritu Santo. Él estaba
presente en la creación del mundo y está disponible para ayudarnos
mientras procuramos reconstruir nuestra vida. No podemos vencer nuestra
adicción o compulsión solos, pero Dios está más que dispuesto a
ayudarnos. Él envió a su hijo quien, mediante su muerte y resurrección,
destruyó el poder del pecado. Ahora podemos seguir el plan de Dios y
elevar una vida piadosa gracias al poder del Espíritu Santo en nosotros.
Pablo divide a las personas en dos categorías: los que se dejan
controlar por su egoísta <> y los
que andan conforme al Espíritu Santo. Una vez que hayamos tomado la
decisión de entregarle a Dios nuestra vida, debemos escoger
conscientemente seguir su camino para permanecer a diario en la ruta de
la recuperación. Debemos reevaluar continuamente nuestro progreso,
haciendo un constante inventario moral de nuestra vida.
O tenemos al Espíritu Santo y este mora en nosotros o no lo tenemos
¿Cómo viene el Espíritu Santo a morar en nosotros? Mediante un acto de
fe al entregar nuestra vida a Dios y al aceptar la obra de Cristo a
nuestro favor. ¿Podemos sentir el Espíritu Santo de Dios dentro de
nosotros? A veces, pero podemos estar seguros de que él está ahí sea que
sintamos su presencia o no. Dios ha prometido darnos el Espíritu Santo
cuando lo pedimos. Recibimos el mismo Espíritu Santo que resucitó a
Jesús. Dios usará en nosotros éste mismo poder para llevar a cabo
nuestra recuperación.
Juan 3:6 Lo que es nacido de la carne carne es; y lo que es nacido del Espíritu; Espíritu es.
Tenemos que matar la carne y vivir en el Espíritu, y ser guiados por el
Espíritu de Dios para hacer buenas obras delante de nuestro padre y no
dejarnos guiar por la carne que no nos dejará nada bueno.
Lo que Satanás nos ofrece son espejismos!!! Siempre el camino de que el
diablo nos muestra parece más fácil pero en realidad es un camino lleno
de espinas y sin fin alguno y claro los deseos de la carne son los que
luego nos llevan a tomar decisiones o hacer cosas de las cuales
seguramente nos terminaremos arrepintiendo así que mejor dejemos la
carne a un lado y vivamos en el Espíritu Santo para que todo lo que
hagamos sea guiado por Dios primeramente y no por nuestra carne.
Que el Señor os bendiga, un saludo.