Y me dijo Jehová:no digas soy niño

Y me dijo Jehová:no digas soy niño, porque a todo lo que te envié irás tú, y dirás todo lo que te mande- Jeremías 1-7

Jeremías cuando empezó a recibir palabra del Señor era un joven como de veinte años más o menos.

Dios lo llamó como profeta, y él le respondió:

He aquí no sé hablar, porque soy niño

y ya hemos visto la respuesta del Señor a la objeción de Jeremías.

Cuando leía esto pensaba en todo los que hemos recibido el llamamiento a servir a Dios, sea de pequeño o de grande, y cuántos hemos respondido a ese llamamiento.

Muchos de los que tal vez hemos escuchado al Señor desde pequeños seguro que, como Jeremías, Dios nos ha tenido que decir muchas veces- No temas- .

Por que ciertamente el camino no es fácil, como tampoco lo fue para Jeremías.

Él tuvo que pagar un alto precio, tuvo luchas muy fuertes, incluso fue azotado por un sacerdote que presidía en la casa de Dios -Jeremías 20:1-2

Fue escarnecido y se burlaron de él, v:7.

Los que ya de grandes han recibido al señor como salvador y también un llamamiento especifico, tal vez les resulte más difícil, pero el señor os dice a vosotros: - No temáis- no temáis a cada uno en particular.

Los temores nunca van ha faltar, pero nuestro Dios está por encima de ellos, y la victoria está asegurada.

Ten fortaleza, pero en el Señor; ten fe, pero en Él, no en lo que puedas hacer tú.

Dios nos hizo para ser vencedores, no vencidos.

Este versículo que sigue no sólo fue para Jeremías, sino también para nosotros ahora.

Amén

Vamos a hacerlo nuestro.