Él sigue con nosotros

por **Evangelista** Mar 07 Feb 2017, 10:53 pm

Él sigue con nosotros

Él sigue con nosotros 07-02-10

Esta semana, alguien se ofreció a pagar mi pasaje de retorno a Lima desde los Estados Unidos. Pero no solo eso, ¡sino que en primera clase! Lo primero en lo que pude pensar fue... ¡AMÉN!

Cuando subí al avión, no tuve que ir hasta la fila 34, porque me tocaba la 4. Era un trono. Tenía espacio para estirar mis piernas y la azafata vino a servirme un vaso con agua, pero no en un vaso de plástico, ¡¡sino uno de vidrio!! Estaba tan asombrado que no resistí sacar mi celular y tomarme un selfie en mi asiento de primera clase posando con el vaso de vidrio.

¡Ese viaje será algo que nunca olvidaré! Ha creado una expectativa en mí por cosas buenas que ocurrirán en el futuro.

¡La Biblia está repleta de estas experiencias! Nos habla acerca de recordar no solo lo que Dios ha hecho por nosotros,

sino de creer lo bueno que Él aún tiene preparado para nuestras vidas.

Deuteronomio 8:12-18 dice que Dios es el que nos ha provisto de TODO lo que tenemos. Pero Él no estuvo solamente para eso, Él sigue con nosotros; no lo olvidemos.

Recordemos. No perdamos la perspectiva. No olvidemos quién es Dios y qué es lo que ha hecho por cada uno de nosotros. (Salmos 103). Recordemos que nuestra condición actual no nos define, sino que lo que nos define es lo que Dios ha hecho y hará por nosotros.

Jesús instauró la Santa Cena como un recordatorio de lo que Él hizo por nosotros. Es un recordatorio de que Él ya pagó por nuestros pecados. ¡Es un recordatorio de que vivimos bajo gracia!

Para tener una buena expectativa para el futuro, es necesario que recordemos lo que Dios ha hecho. Esto resulta en una expresión de una fe que está viva.

Recordar es celebrar
Así como en los cumpleaños recordamos el nacimiento de alguien especial y celebramos, igualito debería ser con Dios. ¡Recordemos lo que Él ha hecho en nuestras vidas y celebremos! Recordar y celebrar son dos cosas que deben ir juntas.

Recordar es agradecer
Cuando empezamos a recordar, nuestro corazón se llena de agradecimiento.

Nosotros no merecemos la bondad de Dios ni nada de lo que menciona el Salmos 103. ¡Pero es por su gracia que Él nos lo ha dado, porque nos ama! Nunca olvidemos esto, llenará nuestro corazón de unas ganas de dar gracias sabiendo que no deberíamos tener lo que tenemos, pero lo tenemos.
Extracto de Prédica. Ps. Daniel Gutiérrez. CDVSanMiguel, domingo 6 de noviembre del 2016.