Lo que es, ya ha sido, y lo que será, ya fue, y Dios restaurará lo que pasó.

Eclesiastés 3: 14 al 15

      Al leer la crónica de la formación de las cosas en Génesis, se observa que está registrada en tiempo gramatical pasado, lo cual no tiene nada de extraordinario. Y al leer la crónicadel fin de las cosas en Apocalipsis, nos damos cuenta que también está registrada en tiempo gramatical pasado, lo cual si es bastante extraordinario. Entonces el Logos escrito encierra a este universo en el pasado (2da de Pedro 3: 7 al 13, y Apocalipsis 21: 1), y por eso las cosas actuales son inexistentes, pero en relación al punto de vista profético. Por ello el libro de Génesis dice; "hizo Dios". Y también Ezequiel dice; "Hecho he conforme a todo lo que me mandaste". Asimismo el Evangelio de Juan dice; "Consumado es". E igualmente en Apocalipsis de Juan dice dos veces (en 16: 17, y en 21: 6); "Hecho es" (además hay un juramento del misterioso "ángel en la nube" de Apocalipsis10: 5 al 7, cuya identidad es revelada en Apocalipsis 14: 14 al 15, gracias al indicador de "la nube"  y a que el verso quince dice; "Y otro ángel salió del templo, clamando en alta voz al que estaba sentado sobre la nube…"). Además en Apocalipsis 21: 6; la palabra griega usada es "gegonan", la cual en Castellano equivale a un verbo auxiliar, que indica que otro verbo o acción se ha consumado. Si bien en este caso específico; indica la consumación de toda acción en este cosmos.

     Felizmente Yahweh se desborda más allá del tiempo y espacio presentes, pues "las Escrituras" nos explican, que los cielos no pueden contenerlo (y sabemos que el espacio es tiempo; por lo cual el tiempo no puede contenerlo). Así que Él es la opción para escapar de este cosmos condenado; y alcanzar la prolongación de nuestra vida. Pero primero hay que vislumbrar el lugar que podemos tener gracias a Su Cordero (un lugar de vida infinita, de honor permanente, y de riqueza eterna), obtener la noción de donde estamos ahora (un lugar de vida finita, de deshonra por el pecado, y de cosas por acabarse), y ejercer la fe que cierra la distancia entre ambos puntos (fe que opera por la Caridad de Yahweh Jireh).

     Y es que la fe en el Cordero provisto por Yahweh; es mucho más que una linda idea, con la que se alimenta la esperanza de nosotros los desposeídos, que estamos en espera de bienes permanentes (hoy invisibles para los sentidos del cuerpo; por ser parte de un extrauniverso). Puesto que es la sustancia concreta de las promesas de Eloheinu; es decir; la profética realidad que ya estamos viviendo, en un cielo nuevo y en una Tierra nueva, donde mora la Justicia que da Paz.

     Entonces la fe en el Cordero del Proveedor, nos permite acceder a la esperanza, de lo que somos proféticamente. Por lo cual, bajo esta perspectiva no importa lo que hemos sido, ni lo que hoy parece que somos, pues el Padre en Su Gracia dada en Su Mesías; nos ve como lo que ya somos en la Eternidad. Aunque ello no implica; que en el presente vivamos alejados de nuestro Elohim. Porque el apóstol Pablo nos enseña que somos hechura de Cristo, formados para llevar a cabo las buenas obras que nos fueron preparadas, desde antes de la fundación del mundo. Y esto en realidad no tiene nada de fantasioso; porque es una mera cuestión de causalidad (es un llano asunto de causa y efecto). ¿O acaso no se han de cosechar uvas; cuando antes se han plantado vides?

¡Saludos y bendiciones!

Jorge Hijo de Lázaro.